Entre los principales puntos tratados en la ponencia se abordaron los principales cambios que se producen en el climaterio (normalmente producido entre los 40 y 50 años) debido fundamentalmente a una disminución de los niveles de estrégenos. Entre estos cambios encontramos la aparición de los llamados sofocos, la osteoporosis, los riesgos cardiovasculares, problemas urinarios, depresión o pérdida de memoria, entre otros. Asimismo, se producen notables modificaciones en la apariencia física como el aumento de peso, la pérdida de cabello y de su densidad o el envejecimiento de la piel.
En este sentido, la ponente aclaró que “el uso de productos farmacéuticos así como una completa actuación durante esta época de la vida en la mujer son claves”. “Es aquí donde el farmacéutico, como profesional sanitario, debe estar implicado en el cuidado de la piel y el cabello, recomendando a las pacientes protocolos específicos que completen los tratamientos ginecológicos a los que se somete la mujer”, añadió.